23 marzo 2011
Elizabeth Taylor
De la misma manera que se apagan las estrellas del firmamento se marchan las estrellas del celuloide. Hoy ha fallecido una de las más grandes, Liz Taylor, que está a la altura de las estrellas más altas. Perfectamente comparable con Monroe, Gadner o Bacall era tan inmensamente bella con gran actriz. Trabajó con los mejores directores y protagonizó escenas imborrables entre las disputas de Rock Hudson y James Dean o en el antiguo egipto, que fueron seguramente sus mejores interpretaciones, Cleopatra y La gata sobre el tejado de zinc. Como todas las estrellas ella también fue estridente y coleccionó diamantes y maridos. Hasta en ocho ocasiones se llegó a casar, dos de ellas, y otros tantos divorcios, lo hizo con Richard Burton, con quien coincidió por primera vez en el rodaje de Cleopatra y que fue su gran amor. De ella destacó también la peculiaridad de tener los ojos de color violeta, una característica singular que la hizo aún más única.
14 marzo 2011
No, gracias
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