06 septiembre 2008

à bout de souffle



Una de las primeras muestras de la nouvelle vague es esta obra maestra de Godard, donde un enfant terrible se juega la vida desde la primera escena. Un maleducado gamberro y mujeriego huye de la policia que le ha descubierto como autor de la muerte de un policia cuando huía de dar un golpe. Una película desbordante de pausas y tensión que fue la primera obra del director, que contó con el guión que escribió el genial Truffaut.
Nunca volví a ver a un Belmondo tan sublime como en este film, Jean Seberg volvería a estar magistral en Buenos Días Tristeza, y después una vida de excesos acabaría con su carrera llevándosela por una sobredosis de fármacos.
Una obra de arte de principio a fin, el gesto de Belmondo quedará indeleble en la memoria de todos inmortalizado tiempo después por aquella marca de martini. Este film de culto es uno de mis favoritos, y Godard es un genio anticipado a su época.Una obra de arte de principio a fin. El final del film interpreta el sino que por tiempo que pase, seguirá vigente. Belmondo enamorado de Seberg, se vende al destino y a la voluntad de la mujer, que le traiciona llamando a la policia. La chivata les llevó hasta el final, y solo en el lecho de muerte admite que ha sido traicionado por quien fue capaz de dejarlo todo. C'est la vie ajourd'hui.
Volved a verla, yo lo acabo de hacer tomándome un Cinzano, lo prefiero al Martini.

7 comentarios:

jonceltic dijo...
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Anónimo dijo...

Lamentablemente en la vida real sucede lo mismo, ya que los peores navajazos (y casi siempre por la espalda, o a lo "Psicosis") te las dan las personas más alegadas, a las otras, no les dejas acercarse ni les das opción.....pero a las que quieres realmente....esas son las peores.....

Anónimo dijo...

de todas formas este estilo no es de mis gustos predilectos, para sufrir no hay más que ver el telediario, soy más de reir (o llorar de risa), de emocionarme (o llorar de emoción), incluso la tensión por el misterio y/o acción, pero no de llorar por pena.
La comedia de Katherine Hepburn y Spencer Tracy, James Stewart, el gran Hitchcock por supuesto....y tantos otros, Cary Grant, Gregory Peck, y más recientes, "el Golpe" (PELICULON, y una de las mejores parejas que dió el cine) Al Pacino, Robert de Niro.....etc etc

Jorge Duloc dijo...

Se trata de una historia que Truffaut habia dejado de rodar, Michel (Belmondo)nos lo muestra Godard como un vividor que disfruta y padece al mismo tiempo. Durante toda la pelicula podemos ver como huye tanto de la policia como de sus propios sentimientos y aunque carece de todo tipo de moral se enamora de Patricia (Serberg)una mujer guapa y perturbadora que siempre duda de todo. Lo que mas me fascina es que Godard deja que los sentimientos afloren sin ningun tipo de limite o logica, igual que pasa en la vida real y en el amor. El guion tan solo recogía algunas ideas, por lo tanto los actores podian improvisar libremente, filmando algunas escenas camara en mano logró imprimir mayor realismo a la pelicula. Como el mismo Godard dijo en su momento..."Todo lo que necesitas para hacer una pelicula es una pistola y una chica".

jonceltic dijo...

ES muy completa tu aportación JORGE, pero qué opinas de lo último que reseño en el artículo, o del homenaje que la marca de un vermouth hace al gesto de Belmondo??

Jorge Duloc dijo...

JON, me alegro que me hagas esas preguntas. Referente a tu ultimo comentario sobre el final de la pelicula About de Soufflé como tu bien dices es el interminable sino de la vida, a las mujeres les gustan los hombres desesperados y si no los encuentran, los hacen.
Es una pelicula de amor y odio, de momentos felices y de grandes fustraciones "vivir peligrosamente hasta el final"..En la ultima escena de la pelicula, delante del cuerpo de Michel ella se siente ganadora y sonrie...
Respecto al gesto de Belmondo pasandose provocativamente el dedo por los labios y que ha sido rescatado por Martini para sus glamurosos anuncios me parece genial, la pelicula esta llena de iconos como el cuadro de Romeo y Julieta que se ve en la habitación del hotel como elemento representativo de la acción o esa escena en que Michel se para a observar un primer plano de Bogart en un cartel de cine lo cual nos corrobora que en la nouvelle vague admiraban algunas figuras como Bogart o Hitchcock, pero sinceramente yo ni Cinzano ni Martini, prefiero Vermouth Perucchi blanco, jamas he probado un vermouth tan exquisito, el elixir de los Dioses. Si teneis ocasión de probarlo ya me contareis...

jonceltic dijo...
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