25 octubre 2009

caro diario


Fuera de lo cinematográfico, con esta película el espectador conduce una vespa por las calles de Roma, tal cual. Moretti utiliza su sarcasmo para endulzar el realismo diario de una ciudad bella como su nombre invertido. Éste es un drama con acento romano, tan irónico como bipolar en el estado de ánimo. Una bonita excursión que me ha soñado como un Garibaldi resistente.

Nanni Moretti sabe bien lo malo que es estar malo y así nos lo trasmite en su película. Caro diario está dividida en tres capítulos: En vespa (paseando en moto por Roma), Islas (visitando las Islas Eólicas, en el mar Tirreno) y Médicos. En esta última parte nos cuenta cómo durante un año padeció un horrible prurito –especialmente nocturno- que no se calmaba con nada. Visitó a cinco dermatólogos, un alergólogo, ingirió muchísimos fármacos, se aplicó una variedad insultante de cremas, se dio baños con todo tipo de productos, se sometió a la reflexoterapia y a la acupuntura y todo ello sin resultado. Cada vez se encontraba peor, sudaba por las noches e iba bajando de peso. Un día, cuando le estaban aplicando la acupuntura con agujas eléctricas, se dieron cuenta de que no paraba de toser, así que le hicieron una radiografía de tórax. Le detectaron una masa pulmonar, le realizaron un scanner con contraste y el radiólogo sentenció: eso es un sarcoma pulmonar y no tiene cura. A continuación, a Moretti lo operaron y, según le contaron, cuando el cirujano estaba tomando una muestra del tumor para llevarla luego al laboratorio de anatomía patológica, dijo en voz alta y clara: me juego un huevo..., no los dos pero sí un huevo a que esto es un linfoma de Hodking y que tiene cura... Así fue. A Nanni Moretti le dieron quimioterapia, está vivo y sigue haciendo películas. Al final de ésta nos lee lo que escribió en su diario: cuando salí de la operación busqué en una enciclopedia lo del linfoma de Hodking y ponía que es una enfermedad cuyos síntomas son prurito, sudoración nocturna y pérdida de peso. Después de esto he aprendido dos cosas. Primera, que los médicos saben hablar pero no escuchar. Segunda, que es bueno para el riñón tomarse un vaso de agua antes del desayuno”.

Nanni Moretti sabe bien lo malo que es estar malo y así nos lo trasmite en su película. Caro diario está dividida en tres capítulos: En vespa (paseando en moto por Roma), Islas (visitando las Islas Eólicas, en el mar Tirreno) y Médicos. En esta última parte nos cuenta cómo durante un año padeció un horrible prurito –especialmente nocturno- que no se calmaba con nada. Visitó a cinco dermatólogos, un alergólogo, ingirió muchísimos fármacos, se aplicó una variedad insultante de cremas, se dio baños con todo tipo de productos, se sometió a la reflexoterapia y a la acupuntura y todo ello sin resultado. Cada vez se encontraba peor, sudaba por las noches e iba bajando de peso. Un día, cuando le estaban aplicando la acupuntura con agujas eléctricas, se dieron cuenta de que no paraba de toser, así que le hicieron una radiografía de tórax. Le detectaron una masa pulmonar, le realizaron un scanner con contraste y el radiólogo sentenció: eso es un sarcoma pulmonar y no tiene cura. A continuación, a Moretti lo operaron y, según le contaron, cuando el cirujano estaba tomando una muestra del tumor para llevarla luego al laboratorio de anatomía patológica, dijo en voz alta y clara: me juego un huevo..., no los dos pero sí un huevo a que esto es un linfoma de Hodking y que tiene cura... Así fue. A Nanni Moretti le dieron quimioterapia, está vivo y sigue haciendo películas. Al final de ésta nos lee lo que escribió en su diario: cuando salí de la operación busqué en una enciclopedia lo del linfoma de Hodking y ponía que es una enfermedad cuyos síntomas son prurito, sudoración nocturna y pérdida de peso. Después de esto he aprendido dos cosas. Primera, que los médicos saben hablar pero no escuchar. Segunda, que es bueno para el riñón tomarse un vaso de agua antes del desayuno”.

5 comentarios:

Il Venturetto dijo...

"He aprendido dos cosas: Primera, que los médicos saben hablar pero no escuchar. Segunda, que es bueno para el riñón tomarse un vaso de agua antes del desayuno"

Lo primero ya lo sabía, pero lo segundo lo voy a poner en práctica.

Por cierto, ¿soy yo o alguien más ha tenido un deja vú al leer la segunda parte del post? ;D

Un saludete

Sonia dijo...

Creo que haré por verla...aunque has explicado demasiado la peli! ;)
Un saludo

Schuster dijo...

Pelicula im-pres-cin-di-ble (en 5 palabras).
Gracias a nuestro amigo he podido recuperar una de las secuencias mas extraordinarias de la Historia del Cine (quiza exagero):
Moretti y su Vespa van a visitar el lugar donde asesinaron a Passolini, con la música de fondo de Keith Jarret (Köln Concert).
En mi imaginario ocupa uno de los primeros lugares, junto al bailarín de claque que aparece en 8 y medio de Fellini.
El recuerdo merece una buena pinta en la taberna.

abretedeorejas dijo...

Yo he tenido el mismo deja vù Venturetto!..he llegado a pensar si no sería fruto de mi menopausia galopante...que me tiene muegta! Ufff....que zuto!

abretedeorejas dijo...

Ah, Shuster, gracias por mentar a Keith Jarret...al escucharlo, trajo a mi memoria el tema "Way it is" de Bruce Hornsby Este que sugieres, me ha parecido muy excitante. Veré la peli en cuanto tenga ocasión y prestaré atención a ese momento.