La adolescencia escolar americana se basa en la subsistencia invasiva, cuando uno dice voy a putear a otro en clase, le haré creer que es tonto y así tengo uno al menos al que ganaré en cualquier pelea, porque sus reverencias al chulito le humillarán en una exclavitud sin metáforas.
Elephant es una obra coballa de Gus Van Sant, un experimento al estilo Michael Moore con Bowling for Columbine que analiza la crisis en los institutos de la america profunda, chicos con complejos y espinillas que beben televisión y meriendan violencia a veces desde niños, crecen codeándose con el fracaso familiar y sueñan con ser el héroe que nunca verán en el alcoholismo de sus padres. En Elephant, John es uno de esos problemáticos niños que se cruza con ejemplares variopintos, un aficionado a la fotografía que nunca abandona su cámara, tres adolescentes lobeznas de garrafón, una acomplejada que no se acepta a sí misma o dos vengadores del Vietnam que entrarán en el instituto armados hasta los dientes y que causan una tremenda masacre.
Aquí valen muchas reflexiones que cuestionan el sistema educativo americano, basado en unas costumbres arrogantes y dementes. Van Sant consigue que tiembles de pánico con esta película denuncia, muy lejana de aquel florido pensil.
2 comentarios:
Un tema para temblar, si tienes niños en esa edad...
ppenelope.
es una película escalofriante.
Publicar un comentario