foto concepció
Todas las mañanas amanecían con la oscuridad propia de una calle estrecha en la que aún no había el sol que enfriaba el ambiente, una sensación contraria a la del silencio de la noche en la que oíamos las campanas de la Catedral dar cada hora. Mi vida infante creció en una adyacente de la Vía Laietana de Barcelona, en pleno barrio condal donde todo queda a un tiro de piedra, los síbaris como mi abuelo llegan con una pedrada al Palau de la Música Catalana, el Liceo o el club Natació Barcelona. Los pintores del montón como mi padre disfrutan con las exposiciones de la calle Canuda y la Plaça del Pi. El compulso capricho de mi madre disfruta con el entorno de la plaza Catalunya, donde la vida es un comercio entero. A mi en cambio, ca'n Barça me quedaba muy lejos y el mercado de San Antonio también. Pero la afición coleccionista empecé a compartirla con mi padre, ésa sí, y cada domingo acudíamos a nuestro santurario del coleccionismo, él compraba revistas de historia y yo completaba mi colección de cromos y me beneficiaba de un buen montón de TBO que me acompañaban de vuelta a casa a la hora de la comida. Aquellos sí que eran tebeos.
3 comentarios:
El edificio del futuro edificio del Memorial Democrático de la Generalitat de Catalunya estará en Via Laietana. Acabo de leerlo leer aquí la noticia
Que bonitos tus recuerdos y que lejos te has ido de ese centro.
Mi retorno es frecuente Sonia. Hay imanes que pueden más que nada.
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